viernes, 18 de enero de 2019

Centro de seguimiento de exposición a campos electromagnéticos

DIFUNDIR Y FIRMAR (solo los que vivan en Madrid)

Pilar Gomis Muñoz • 28/12/2018 • Toda la ciudad •

Código proyecto de gasto: 16081

El ser humano nunca ha estado expuesto a tantas ondas electromagnéticas. Hay muchos estudios sobre el posible efecto dañino de las radiaciones no ionizantes utilizadas por la telefonía móvil, asociándolas con diversas enfermedades, incluso tumores cerebrales.

En 2011 se publicó la resolución 1815 de la Comunidad Económica Europea (http://assembly.coe.int/nw/xml/XRef/Xref-XML2HTML-en.asp?fileid=17994) que recomienda disminuir al máximo la exposición a estas radiaciones, especialmente en los grupos más vulnerables como son los niños.
  1. Proponemos crear un centro de seguimiento de exposición a campos electromagnéticos      no ionizantes con dos objetivos principales:
  2. Conocer el nivel de exposición de los ciudadanos de Madrid.
  3. Informar y hacer recomendaciones para disminuir la exposición a estos campos electromagnéticos.
  4. Promover el establecimiento de zonas libres de ondas electromagnéticas en espacios como transportes públicos, hospitales, centros de salud, oficinas públicas, etc.
Pequeñas acciones y cambios en nuestras costumbres pueden disminuir drásticamente la exposición a estos campos. Algunas de éstas pueden ser:
  • Utilizar la opción de manos libres o los auriculares cuando vayamos a tener una conversación larga en el móvil.
  • No dejar el móvil en la mesilla cuando dormimos. Utilizar un despertador de pilas.
  • Apagar la opción de “wifi” y “datos” en el teléfono móvil cuando no hagan falta para disminuir su emisión de ondas, especialmente en niños o mujeres embarazadas.
  • Apagar el wifi del router cuando no se utiliza, especialmente por la noche. (Los routers suelen tener una opción para apagar solo el wifi.)
  • Utilizar en la medida de lo posible dispositivos conectados a cable Ethernet, y desactivar el wifi (aunque se use internet por cable el dispositivo sigue buscando wifi si no se desactiva)
  • No utilizar teléfonos inalámbricos. Cambiar el teléfono fijo a uno de cable.
  • Desaconsejar el uso de wifi en guarderías y limitarlo en colegios.
  • Utilizar pinturas, vinilos o cortinas que impiden el paso de ondas electromagnéticas cuando exista un foco externo a la casa que aumente mucho la exposición a esas ondas. (Por ejemplo, cuando su casa está cerca de alguna antena de telefonía o cuando el wifi de los vecinos está en la misma pared que la cama o el sillón..).
  • Cuando el móvil esté cerca del cuerpo, por ejemplo en un bolsillo, utilizar fundas que no permitan pasar las ondas hacia el cuerpo.
  • Evitar el uso del microondas o alejarse de él cuando está en funcionamiento.
También se debería pedir a las compañías eléctricas que informen sobre el nivel de emisión de ondas de los distintos dispositivos móviles y que permitan conectarlos a cable Ethernet. (Muchas veces utilizamos el móvil para ver videos y películas en casa y sería más seguro hacerlo por cable, desactivando el wifi y los datos, o en “modo avión” si no esperamos llamada).

Existen numerosas publicaciones científicas que confirman que los campos electromagnéticos de frecuencias utilizadas en telefonía móvil modifican el funcionamiento de las células humanas y animales. La exposición a estas ondas se ha relacionado con síntomas como fatiga, alteraciones del sueño, dolores de cabeza, malestar, dificultad para concentrarse, depresión, pérdida de memoria, alteraciones visuales, irritabilidad, alteraciones de la audición , erupciones cutáneas, problemas cardiovasculares, mareos, pérdida de apetito, dificultades de movimiento, náuseas, etc..

Cada vez hay más personas con electrosensibilidad que presentan los síntomas anteriormente citados, y las asociaciones de pacientes con síndrome de sensibilidad central se han multiplicado en los últimos años. Los casos más severos deben alejarse de los centros urbanos y vivir en zonas con poca exposición a campos electromagnéticos.

En algunos países se ha observado un aumento de tumores cerebrales tipo glioma y se especula si pudiera estar relacionado con el aumento de exposición a estos campos electromagnéticos. Un estudio sueco relaciona el uso de móviles y teléfonos inalámbricos al desarrollo de estos tumores, y describen un aumento de probabilidad de que estos tumores se desarrollen cerca del oído donde el paciente coloca el teléfono para hablar.

La resolución 1815 del consejo de Europa del 2011 sobre “Peligros potenciales de los campos electromagnéticos y sus efectos sobre el medio ambiente” recomienda tomar medidas para prevenir estos riesgos y no esperar a altos niveles de evidencia científica y clínica ya que esto puede conducir a muy alto costo económico y de salud, como fue el caso del amianto, la gasolina con plomo y el tabaco.

Algunas de sus recomendaciones son:
  • Tomar todas las medidas razonables para reducir la exposición a los campos electromagnéticos, especialmente a las radiofrecuencias de los teléfonos móviles, y en particular la exposición a los niños y jóvenes que parecen estar en mayor riesgo de tumores cerebrales.
  • Aplicar el principio ALARA (“As Low As Reasonably Achievable” es decir “tan bajo como sea razonablemente posible”)
  • Informar y hacer campañas de concienciación sobre los riesgos de efectos biológicos potencialmente nocivos a largo plazo sobre el medio ambiente y en la salud humana, especialmente dirigida a los niños, adolescentes y jóvenes en edad reproductiva.
  • Prestar especial atención a las personas “electrosensibles” que sufren de un síndrome de intolerancia a los campos electromagnéticos e introducir medidas especiales para protegerlos, incluida la creación de zonas libres de onda no cubiertas por la red inalámbrica
  • Intensificar la investigación sobre nuevos tipos de antena, teléfono móvil y dispositivo de tipo DECT, y fomentar la investigación para el desarrollo de las telecomunicaciones sobre la base de otras tecnologías que son tan eficientes, pero cuyos efectos son menos negativos sobre el medio ambiente y la salud
  • Aumentar la conciencia sobre los posibles riesgos para la salud de los teléfonos inalámbricos DECT, monitores de bebés y otros aparatos domésticos que emiten ondas de pulso continuo si todo el equipo eléctrico está permanentemente en espera, y recomendar el uso de teléfonos fijos por cable en el hogar o, en su defecto, modelos. que no emitan permanentemente.
  • Desarrollar dentro de los diferentes ministerios (educación, medio ambiente y salud) campañas de información dirigidas a los maestros, padres y niños para alertar a los riesgos específicos de principios, mal considerado y prolongado uso de teléfonos móviles y otros dispositivos que emiten microondas afectados.
  • Para los niños en general, y en particular en las escuelas y aulas, dar preferencia a las conexiones a Internet por cable y regular estrictamente el uso de teléfonos móviles por los escolares en las instalaciones escolares.
  • Establecer medidas urbanísticas para mantener las líneas eléctricas de alta tensión y otras instalaciones eléctricas a una distancia segura de las viviendas.
  • Aplicar estrictas normas de seguridad para el impacto en la salud de los sistemas eléctricos en viviendas nuevas.
  • Reducir los valores de umbral para las antenas repetidoras de conformidad con el principio ALARA e instalar sistemas de seguimiento exhaustivo y continuo de todas las antenas.
  • Determinar los sitios de cualquier nueva GSM, UMTS, Wi-Fi o antenas WiMAX no únicamente en función de los intereses de los operadores, pero en consulta con las autoridades gubernamentales locales y regionales, los residentes y las asociaciones de ciudadanos interesados locales.
Existen muchísimos estudios en animales y en cultivos celulares humanos que demuestran que existe un efecto de estas ondas en el organismo. Existen también estudios epidemiológicos que encuentran asociación de estas ondas con diversas enfermedades pero probar la causalidad no es fácil. Sin embargo, no tiene sentido esperar a que los estudios sean concluyentes para prevenir el desarrollo de estas enfermedades. El debate no debería ser ¿son o no son dañinas? Si no ¿por qué no se apuesta por la prevención? Existe ya suficiente evidencia de que es posible que estos campos sean dañinos para la salud. Pero, incluso en el hipotético caso de que dentro de unos años se concluyera que son seguros, es mucho mejor haber prevenido, ya que, si el escenario es el contrario, sería dramático darnos cuenta de todo el daño que se podría haber evitado.
  
Bibliografia:

Resolución 1815 del Consejo de Europa (2011)


Tumores cerebrales:

Occupational exposure to high-frequency electromagnetic fields and brain tumor risk in the INTEROCC study: An individualized assessment approach. Environ Int. 2018 Oct;119:353-365. doi: 10.1016/j.envint.2018.06.038. Epub 2018 Jul 8.

Encuentran un aumento de probabilidad de gliomas y meningiomas en los pacientes que han tenido una mayor exposición campos electromagnéticos de radiofrecuencia a en los 4 años anteriores al diagnóstico.


Lennart Hardell,Michael Carlberg. Mobile phones, cordless phones and rates of brain tumors in different age groups in the Swedish National Inpatient Register and the Swedish Cancer Register during 1998-2015. PLOS ONE October 4, 2017

A partir del registro sueco de tumores, envían una encuesta a 1380 pacientes que han sobrevivido a un glioma y preguntan la exposición a teléfonos móviles, inalámbricos y en que oído ponen presentemente el teléfono. Buscan un número similar de sujetos con características similares que no hayan desarrollado tumores cerebrales y los comparan. Encuentran una asociación entre el uso de teléfonos móviles e inalámbricos y la aparición de tumores cerebrales. Existía una mayor probabilidad de desarrollar el tumor cerca del oído donde habitualmente el paciente colocaba el teléfono.


Clasificación de los campos electromagnéticos de radiofrecuencia como “posible carcinogénico para humanos”