miércoles, 19 de enero de 2011

Un estudio médico se interesa por la fibromialgia

La asociación de personas afectadas, Agafi, insiste en que sea reconocida como dolencia incapacitante
Autor: J. GÓMEZ Localidad: SANTIAGO
Fecha de publicación: 19/1/2011 - + Enviar Imprimir Volver

Dos médicas de Lugo y otra de A Coruña han contactado con la Asociación Galega de Fibromialxia (Agafi), con sede en Santiago, para realizar una investigación sobre este problema de salud. Pretenden estudiar el interés del tratamiento en balnearios para la recuperación de las personas afectadas. Agafi colaborará en este proyecto, y un número importante de sus asociados se han mostrado favorables para apoyar el trabajo de estas tres profesionales.


La presidenta de Agafi, Dolores Bermúdez, afirma que es una muestra más de la excelente disposición del colectivo que representa para ayudar a la búsqueda de soluciones, porque «esta doenza supón un malvivir continuo para as persoas que a padecen», explica, por los continuos dolores en diversas parte del cuerpo.

Otros estudios

Desde Agafi ya se ha colaborado en otros estudios de profesionales de la salud, como el de la profesora Teresa Carrillo, de la Facultad de Psicología de la USC, que continúa; o el de un especialista en formación del complejo hospitalario, que hace años también se interesó en profundizar sobre este mal.

Para Dolores Bermúdez, una de las principales aspiraciones que persiguen desde los inicios es el reconocimiento de la fibromialgia como enfermedad incapacitante.

«De momento esta doenza non puntúa para o recoñecemento de minusvalías. Se se recoñecese suporía vantaxes, mesmo laborais, pois facilitaría a recolocación das persoas afectadas en postos máis adecuados, ou a procura de outras oportunidades que agora non se teñen en conta», afirma.

Prestaciones

En Santiago y otros lugares se han dado casos de personas afectadas a quienes la Seguridad Social les ha retirado algunas prestaciones, precisamente por la controversia existente sobre este problema y sus consecuencias, agrega.

Desde Agafi se han impulsado diversas iniciativas y se han buscado apoyos, incluso políticos, con el fin de conseguir ese objetivo. El Parlamento de Galicia ha discutido sobre sus aspiraciones, que han sido llevadas a las Cortes del Estado por el BNG, y donde esperan un posicionamiento en los primeros meses de este año.

Bemúdez destaca que, otra de las consecuencias de sus gestiones, ha sido contribuir a que en los centros de atención primaria los médicos de familia se muestren más comprensivos con el colectivo de personas afectadas, pues hace unos años tenían problemas en varios centros de salud.

Reelección

La asociación Agafi reeligió a Dolores Bermúdez como presidenta. Es la única persona que ha ocupado el cargo desde que se constituyó la entidad, en el año 2000. En este período han superado las 1.500 personas asociadas y han abierto sede en diferentes lugares de Galicia. También editan una revista, que aborda cuestiones relacionadas con este problema.

Dolores Bermúdez explica que en este nuevo período mantendrán las gestiones sobre asuntos aún pendientes, y también proseguirán con la celebración del Día de la Fibromialgia, que este año programan para el 14 de mayo, y que ya empiezan a preparar.

Además, responderán a las solicitudes que les llegan de ayuntamientos y asociaciones vecinales o de amas de casa, o centros de información a la mujer, en las que siempre suelen tener elevada asistencia.

«Esta doenza supón un malvivir continuo para as persoas que a padecen»

Dolores Bermúdez

Fuente: http://www.lavozdegalicia.es/santiago/2011/01/19/0003_201101S19C6993.htm

El duelo y la Fibromialgia

Cuando en mi consulta recibo una persona afectada de fibromialgia empezamos por tratar el dolor que la misma enfermedad causa sobre el paciente.

Un duelo es consecuencia de una pérdida. Ya sea de la salud, actividades, trabajo, relaciones personales o expectativas. Una pérdida conlleva un sentimiento de tristeza y es vital elaborarla para evitar que derive en depresión. Es este un punto clave en el tratamiento.

Se trata de guiar a la persona, siguiendo un proceso determinado, para que afronte y elabore este duelo. El paciente debe aceptar la pérdida y no anclarse en un lamento, sino tener una visión realista y optimista. Al final de este proceso logrará adaptarse a un estilo de vida con mayor bienestar.

Otro afecto que se debe trabajar es el sentimiento de rabia a causa de las secuelas que provoca la fibromialgia. Es vital que pueda explayarse. Pero a menudo, según la personalidad del paciente, no es fácil que este sentimiento aflore. En estos casos el terapeuta debe monitorizar para que sea experimentado sanamente, y tener en cuenta que para evitar afrontar algo que le resulta doloroso la persona puede adoptar ciertas actitudes a modo de “tapadera”.

Ejemplos de estas pueden ser: una huida hacia adelante (intentar cargar con más responsabilidad o actividad), una negación de la enfermedad (hacerse el fuerte), desplazar la frustración hacia otros campos o personas, aislarse en el sentirse incomprendido, anclarse inconscientemente en una depresión. Existe el miedo, no consciente, que si se asume la enfermedad y actúa en consecuencia aumenten las pérdidas.

En resumen, si no se afrontan estos sentimientos (entre otros) la consecuencia será acumular más ansiedad, más tensión y por ello más dolor y no adaptarse a los tratamientos y hábitos necesarios para mejorar.

Una vez la persona ya esté tan íntimamente cercana a sus sentimientos, se debe abordar la pregunta crucial: ¿Cómo está actuando el paciente que, consciente o no, colabora negativamente a no tener más calidad de vida? Se trata de indagar qué tipo de pensamientos, qué actitudes, qué conductas no adecuadas realiza, para así conseguir cambiarlas. También hemos de definir su personalidad, analizando las relaciones del paciente con las personas de su entorno y verificar si existen conflictos anteriores que sean causa de ansiedad. A partir de aquí se genera un cambio en el interior de la persona que le permite adaptarse a su vida actual. El terapeuta debe acompañarlo en este cambio.

Me gusta ver a las personas cuando después de este trabajo profundo y emotivo, respiran profundamente, como si se sacaran un peso y expresan algo como: “Bueno, es lo que hay, voy a aprender a afrontar las situaciones conflictivas para a estar mejor y disfrutar de lo que tengo “. Esta actitud me sigue mostrando cada día el poder de experimentar emociones.

Finalmente quiero agradecer a los pacientes todo lo que aprendo con sus casos particulares.

Pilar Benet Ollé
Psicóloga (Tarragona)
benetpilar@yahoo.es

Fuente: http://biorritmes.com/2010/12/el-duelo-y-la-fibromialgia/

Sanidad pública gracias a unos y a pesar de otros

17/01/2011 GMT 1
Sanidad pública gracias a unos y a pesar de otros
collectiu @ 23:39

Isaac Rosa nos cuenta, en su blog de El País Trabajar Cansa, su reciente experiencia en la sanidad pública madrileña, que se mantiene gracias al esfuerzo y abnegación del personal sanitario, a pesar de los intentos del Gobierno Aguirre de desmantelarla a favor de la privada, propugnando la contratación directa de seguros médicos privados. Curiosamente al principio del artículo aparece un anuncio publicitario de Google, ... de un seguro médico privado. En lugar de ponerse en las puertas de los hospitales ahora ya se ponen estos clips publicitarios "a la puerta de los artículos". Vivir para ver.
Me extraña que los vendedores de servicios sanitarios no hayan instalado todavía un tenderete en la puerta de los hospitales y ambulatorios madrileños. No será porque no puedan, que Aguirre es muy liberal y lo autorizaría. Será que no lo necesitan: el recuerdo del paso por la sanidad pública dura lo suficiente como para que muchos contraten un seguro privado sin que se lo vendan a la salida.
Si lo que pretenden es que todos (todos los que puedan pagárselo) nos pasemos a la privada, van camino de conseguirlo: el daño que el gobierno madrileño está haciendo sobre el sistema de salud es criminal. Tras el escaparate de los nuevos hospitales y camelos como la libre elección, la realidad es lamentable: deterioro de instalaciones, privatización de las nuevas, menos personal, saturación.

En los últimos meses he tenido varias experiencias sanitarias, y si no fuera defensor militante de lo público y no supiera además que la privada no es mejor, ya me habría hecho socio de alguna compañía: enormes esperas, personal desbordado, fallos en la concesión de citas (tras privatizar el servicio) y cabreo generalizado entre los usuarios, con escenas de tensión que sufren los trabajadores.

Pero igual que denuncio esto, con la misma fuerza tengo que reconocer el trabajo de los profesionales sanitarios: son ellos los que mantienen en pie el sistema, luchando contra las adversidades, sufriendo malas condiciones laborales, y pese a todo atendiendo con mucho más que profesionalidad, con humanidad, incluso cariño.

Siempre me han gustado esas cartas en los periódicos donde alguien agradece a los médicos que le atendieron, y hoy me sumo a ello: tras la hospitalización reciente de una de mis hijas estoy en deuda con el personal de La Paz: médicos, enfermeros, auxiliares, celadores y de limpieza, todos, tanto de planta como de urgencias, que en circunstancias laborales extremas no sólo no fallan, no sólo entregan más de lo debido, sino que además tienen palabras amables, cariñosas, para quienes lo pasamos mal.

La sanidad pública en Madrid sobrevive gracias a sus trabajadores, y a pesar de quienes intentan cargársela.

Fuente: http://dempeus.nireblog.com/post/2011/01/17/sanidad-publica-gracias-a-unos-y-a-pesar-de-otros