jueves, 24 de octubre de 2019

El 85 % de la población española ha respirado aire contaminado por ozono

Por Ecologistas en Acción / Redacción Tercera Información

Gobierno y comunidades autónomas siguen sin adoptar medidas eficaces sobre el transporte, la industria y la ganadería que eviten los episodios puntuales y reduzcan los niveles de fondo.

El informe estatal sobre ozono elaborado por Ecologistas en Acción analiza los datos recogidos en 480 estaciones oficiales de medición repartidas por todo el territorio español, entre el 1 de enero y el 30 de septiembre de 2019. Presenta datos exhaustivos de la contaminación por ozono, por comunidades autónomas y por zonas y estaciones de medición.

Entre sus principales conclusiones, destacan:

– El ozono troposférico sigue siendo el contaminante atmosférico que año tras año afecta a más población y territorio en el Estado español. Durante 2019 sus niveles se han mantenido en general estables, con alzas y descensos según los territorios, relacionadas con las variaciones geográficas de las temperaturas y las precipitaciones en primavera y verano.

– El informe de Ecologistas en Acción toma como referencia el valor recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), de acuerdo al cual el aire contaminado por ozono ha afectado en 2019 a 39,8 millones de personas en el Estado español, el 85 % de su población, así como a 455.000 kilómetros cuadrados, el 90 % del territorio. Es decir, seis de cada siete españoles han respirado un aire con más ozono del recomendado por la OMS.

– Si se considera el valor objetivo establecido por la normativa española y europea, más laxo que el de la OMS, la población que ha respirado aire contaminado por encima del estándar legal sería de 9,8 millones de personas, un 21 % del total, en torno a tres millones de afectados más que en 2013 y 2014, pero millón y medio menos que en 2015, 2017 y 2018. Es decir, uno de cada cinco españoles ha respirado un aire que incumple el estándar legal vigente de ozono.

– Durante 2019, los territorios más afectados por el ozono troposférico han sido Cataluña y la Comunidad de Madrid, que han presentado la peor situación general del Estado. La contaminación por ozono ha sido también más alta que en años anteriores en Andalucía oriental, el norte del País Valenciano y el Valle del Ebro de Cataluña al País Vasco, y más baja en el tercio occidental de la Península, la cornisa cantábrica y la Región de Murcia.

– Coincidiendo con las olas de calor estivales, en 2019 se han producido numerosas superaciones del umbral de información y una docena de superaciones del umbral de alerta, concentradas en Cataluña, donde este último umbral no se rebasaba desde el año 2003.

– El ozono es un contaminante muy complejo, que no tiene una fuente humana directa sino que se forma en la superficie terrestre en presencia de radiación solar por la combinación de otros contaminantes denominados precursores, emitidos por el transporte (en especial los vehículos diésel), las centrales termoeléctricas, ciertas actividades industriales o la ganadería intensiva. Se trata por tanto de un contaminante secundario que durante el verano afecta sobre todo a las áreas suburbanas y rurales influenciadas por la contaminación urbana e industrial.

– El mantenimiento de la contaminación por ozono en 2019 es consecuencia en primera instancia del repunte en la quema de combustibles fósiles que está acompañando al nuevo ciclo económico, agravada por el aumento de las temperaturas resultado del cambio climático.

– La contaminación por ozono debe abordarse como un problema sanitario de primer orden. Según la Agencia Europea de Medio Ambiente, causa cada año entre 1.500 y 1.800 muertes en el Estado español. Las personas más afectadas son las niñas y los niños, las personas mayores, las mujeres embarazadas y quienes padecen enfermedades cardiorrespiratorias crónicas.

– El coste sanitario y laboral de la contaminación por ozono fue de 5.000 millones de euros en 2013, un 0,33 % del PIB español, según el Banco Mundial, sin considerar los daños provocados sobre los cultivos y los ecosistemas naturales. Solo los costes económicos de la menor producción de dos cultivos como trigo y tomate, por su exposición al ozono en España, se estimaron en 800 millones de euros en el año 2000, el 3,2 % del PIB agrícola.

– La información a la ciudadanía por parte de las administraciones públicas no es ni adecuada ni ajustada a la gravedad del problema. Pocas ciudades cuentan con protocolos de actuación frente a las puntas de contaminación por ozono, y sólo Valladolid contempla y aplica medidas de limitación del tráfico en episodios como el de la ola de calor de la última semana de junio, cuando mientras las grandes ciudades francesas restringían el tráfico las españolas se limitaban a informar rutinariamente a la población sensible, en el mejor de los casos.

– Los planes de mejora de la calidad del aire para reducir la contaminación por ozono son obligatorios según la legislación. Pero diez comunidades autónomas (Andalucía, Aragón, Illes Balears, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, País Valenciano, Madrid, Navarra y País Vasco) siguen sin elaborarlos. Por vez primera un tribunal regional como el de Castilla y León declaró en 2018 la obligación de dichas administraciones de elaborar tales planes. Obligación sobre la que en los próximos meses se pronunciará el Tribunal Supremo.

– Ecologistas en Acción reclama al Ministerio para la Transición Ecológica que aborde el Plan Nacional de Ozono comprometido hace años, al que remiten las comunidades autónomas. para justificar su inactividad. El vigente Plan Aire II es inoperante porque limita las actuaciones sobre el ozono a la realización de estudios y a la mejora de la medición. Aunque la Audiencia Nacional ha sentenciado que el Plan Aire II da cumplimiento a las obligaciones legales del Gobierno central respecto al ozono, Ecologistas en Acción recurrirá al Tribunal Supremo.

– Las principales vías de actuación para reducir la contaminación del aire por ozono son la disminución del tráfico motorizado, la adopción de las mejores técnicas industriales disponibles, la sustitución de los disolventes orgánicos por agua, el ahorro y la eficiencia energética y el cierre de las centrales térmicas de carbón. También es necesario declarar un Área de Control de Emisiones (ECA) para el Mar Mediterráneo, penalizar fiscalmente a los vehículos diésel y una moratoria para las nuevas grandes explotaciones ganaderas intensivas.

“Hoy ya sabemos cómo actuar con pacientes con síndrome de sensibilidad central”

22 de octubre 2019 por Núria Coll

Me lo encuentro en muchos congresos. Es de aquellos profesionales que no se cansan de estudiar y de aprender. Farmacéutico de formación e hijo de médicos, Marcello lleva en el ADN la vocación de ayudar y de entender a la gente. A la dietética y la PNIE llegó, pero, de golpe. Activo, flexitariano, solar, positivo y empático. Marcello es una persona cercana que, con buenos conocimientos de psicología, puede acompañar a los pacientes en procesos de cambios profundos; esta esencia es la que ahora ofreceremos en nuestra consulta nutricional. Marcello se suma, pues, a la plantilla de La Consulta de Soycomocomo como farmacéutico, dietista y PNIE para acompañar a personas con trastornos intestinales, inmunitarios, hormonales o degenerativos.
¿Cómo empieza tu experiencia profesional?

Tras un posgrado de dos años en la facultad de farmacia en Santiago de Compostela, llego a Barcelona y empiezo a trabajar en una empresa farmacéutica y, poco después, en una oficina de farmacia. Esta última no era mi primera opción, pero me convierto en un punto de referencia para los clientes habituales y hago del trabajo de farmacéutico algo realmente gratificante. Establezco una relación de confianza con el cliente-paciente y me doy cuenta a diario de que lo que hago es muy importante para algunas personas.

Como farmacéutico, mi labor no es realizar un diagnóstico ni prescribir una terapia, si no ayudar a interpretar correctamente las instrucciones del médico y resolver las dudas de los medicamentos, además de explicar la importancia de la dosis correcta e identificar cualquier factor de riesgo.
Aconsejo tomar remedios naturales para mejorar el estado de salud cuando detecto estilos de vida poco saludables y hábitos alimenticios incorrectos.

¿Cómo empiezas con la PNIE?

Por un tema personal. Desde los catorce años sufría migrañas y la medicina alopática solo me ofrecía una medicación para aliviar el dolor. En atención primaria me decían que no podían hacer mucho más. Esto es algo que siempre me ha generado frustración y incredulidad, sobre todo en enfermedades crónicas. Hace cinco años, empecé a explorar otras vías para conseguir una mejora real en la calidad de vida de los pacientes y estudié dietética natural y psiconeuroinmunología.

¿Y mejoraste?

Con los cambios dietéticos mejoré las migrañas y un problema de colon irritable que había arrastrado desde la universidad. De ahí nace en mí el deseo de poder ayudar a muchas personas que padecen problemas similares a los míos.

En La Consulta tratarás enfermedades crónicas y degenerativas, como fibromialgia, fatiga crónica, migraña, síndrome de piernas inquietas, síndrome químico múltiple…

Sí. Algunas de las que has mencionado, todas juntas, forman lo que hoy conocemos como síndrome de sensibilidad central, que es una hipersensibilidad del sistema inmunitario que causa dolor cuando hay exposición a olores fuertes, ruidos, alimentos, productos químicos, campos electromagnéticos, cambios de tiempo, estrés, infecciones y fármacos.

Qué difícil encontrar el tratamiento, ¿no?

Es importante mejorar las defensas y tener unos buenos niveles de vitamina D. En enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide se ha visto que hay una mayor incidencia de dolor crónico con concentraciones séricas de vitamina D por debajo de los 20 ng/ml.

Otro paso esencial es mejorar la permeabilidad intestinal con alimentos como caldo de huesos o probióticos. Si la flora intestinal está alterada, hay que eliminar parásitos y hongos del intestino, ya que empeoran los síntomas de irritación y dolor. También hay que corregir las deficiencias nutricionales que se pueden detectar a través de una analítica, como las de B12, B9, B6 y magnesio, por ejemplo. Para mejorar el descanso y bajar el estrés se puede recurrir a adaptógenos y melatonina.

En lo que se refiere a alimentación, es una buena estrategia seguir una dieta baja en histamina y evitar alimentos como frutos secos, leche y derivados, trigo y pescado azul entre otros. Finalmente, se puede recurrir a la microinmunoterapia.
Cuéntanos qué es la microinmunoterapia.

La microinmunoterapia permite al sistema inmune recobrar su potencial con suavidad y sutileza. Es una terapia que utiliza concentraciones muy bajas, homeopáticas, de mensajeros inmunológicos como citoquinas, ácidos nucleicos o factores de crecimientos, que son las palabras que el sistema inmunitario utiliza para comunicarse.

Se puede combinar con otros tratamientos, no tiene efectos secundarios y generalmente se tolera muy bien.

Se puede usar para combatir el virus del Epstein-Barr, que puede estar detrás de la tormenta perfecta que desencadena enfermedades autoinmunes como la tiroiditis de Hashimoto. También hay remedios para el papiloma y el herpes zóster.

La microinmunoterapia está indicada tanto para el dolor crónico de enfermedades como la fibromialgia o el síndrome de fatiga crónica como para enfermedades inflamatorias intestinal tipo Crohn y colitis ulcerosa.

Es una ayuda también en endometriosis, tanto si hay un componente genético, dolor o un componente emocional muy fuerte; y en la artritis reumatoide, que cursa con un proceso inflamatorio crónico.

¿Qué soluciones hay para los virus y bacterias?

Para estimular la reacción del sistema inmunitario y ayudarle a controlar la proliferación de virus o bacterias podemos ayudarnos de probióticos –como el Saccharomyces boulardii, el Lactobacillus ramnosus o Bifidobacterium lactis entre otros–, de prebióticos –como la fibra de las semillas de chía o de lino o los betaglucanos presentes en hongos como el shiitake–, de vitamina D –presente en el pescado–, de almidón resistente –presente en el arroz y la patata enfriados–, de omega-3 –presente en el pescado azul–, de cúrcuma para modular la inflamación, de vitamina A –presente en el hígado de bacalao–, de alimentos con vitamina E y glutamina para sellar el intestino inflamado y mejorar el efecto barrera hacia los virus, bacterias y tóxicos.

Darás una charla en el Cómo Como Festival el día 30 de noviembre sobre la relación que hay entre dolor crónico y sueño. Cuéntanos algo.

Existe una relación entre el sueño y el dolor crónico, y las personas afectadas por dolor crónico muestran habitualmente alteraciones del sueño. Se sabe que las mujeres con problemas de insomnio tienen más probabilidades de desarrollar fibromialgia en los diez años siguientes. El 50% de las personas con insomnio acaban teniendo dolor crónico y al revés: las alteraciones del sueño provocan la aparición de dolor crónico en personas que antes no tenían dolor.

Eso se ha visto también en las enfermedades inflamatorias intestinales, como la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn, como también veremos en la charla.

Fuente: https://soycomocomo.es/invitado/marcello-soi

POSIBLE RELACIÓN DE LA INTOLERANCIA AL GLUTEN Y LA INTOLERANCIA AL GLIFOSATO

UN ESTUDIO DE INVESTIGADORES DE LA UNIVERSIDAD DE CAMBRIDGE INDICA UNA POSIBLE RELACIÓN DE LA INTOLERANCIA AL GLUTEN Y LA EPIDEMIA DE LA ENFERMEDAD CELÍACA CON EL USO DEL HERBICIDA ROUNDUP®

La enfermedad celíaca, y, en general, la intolerancia al gluten, es un problema creciente en todo el mundo, pero especialmente en América del Norte y Europa, donde aproximadamente el 5% de la población lo padece.

En un análisis independiente de casi 300 estudios realizados por dos investigadores independientes de la Universidad de Cambridge, llegan a la conclusión de que el uso del glifosato en los cultivos podría estar relacionado con el aumento de los casos de la enfermedad celíaca.

En él proponen que el glifosato, el ingrediente activo en el herbicida Roundup®, sería el factor causal más importante de esta epidemia, no de la enfermedad en sí. El estudio, publicado en la revista Toxicología interdisciplinaria en 2013, fue completamente ignorado por los medios de comunicación, a excepción de Mother Earth News y The Healthy Home Economist.

Ahora es cuando el glifosato está empezando a recibir la atención que merece, ya que la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Estado de California (EEUU) lo nombran como el culpable en una demanda por cáncer de $ 280 millones y es catalogado como cancerígeno.

SÍNTOMAS DE LA INTOLERANCIA AL GLUTEN

Los síntomas de la llamada “intolerancia al gluten” y la enfermedad celíaca son sorprendentemente similares a los síntomas en los animales de laboratorio expuestos al glifosato, argumentan los autores del estudio, Anthony Samsel, un científico independiente que trabajó como asesor de la EPA sobre la contaminación por arsénico, y Stephanie Seneff, una investigadora científica del MIT.

Señalan un estudio reciente sobre cómo el glifosato afecta los sistemas digestivos de los peces. Disminuyó las enzimas y bacterias digestivas, rompió los pliegues de la mucosa, destruyó la estructura de las microvilas en la pared intestinal y aumentó la secreción de mucina. “Estas características recuerdan mucho a la enfermedad celíaca”, escriben Samsel y Seneff.

AUMENTO DE CASOS DE INTOLERANCIA AL GLUTEN RELACIONADA CON EL AUMENTO DEL USO DE HERBICIDAS

Además, el número de personas diagnosticadas con intolerancia al gluten y enfermedad celíaca ha aumentado a la par que el aumento del uso de glifosato en la agricultura, especialmente con la práctica reciente de empapar granos en el herbicida justo antes de la cosecha, que comenzó en la década de 1980 y se convirtió en una rutina en la década de 1990:

Si bien algunos sugieren que el reciente aumento en la enfermedad celíaca se debe simplemente a mejores herramientas de diagnóstico (como se puede ver, sucedió alrededor del 2000), el estudio reciente de la Universidad de Cambridge sugiere que es más que eso.

En 2009, los investigadores buscaron anticuerpos contra el gluten en el suero inmune congelado obtenido entre 1948 y 1954 para los anticuerpos contra el gluten, y los compararon con muestras de personas de la actualidad. Encontraron un aumento de 4 veces en la incidencia de la enfermedad celíaca en la generación más joven.

CONCLUSIONES A LAS QUE HAN LLEGADO LOS INVESTIGADORES

“La enfermedad celíaca se asocia con desequilibrios en las bacterias intestinales que pueden explicarse completamente por los efectos conocidos del glifosato en las bacterias intestinales”.

“La enfermedad celíaca está asociada con el deterioro de las enzimas del citocromo P450. Se sabe que el glifosato inhibe las enzimas del citocromo P450″.

“Las deficiencias de hierro, cobalto, molibdeno, cobre y otros metales raros asociados con la enfermedad celíaca se pueden atribuir a la gran capacidad del glifosato para quelar estos elementos”.

“Las deficiencias en triptófano, tirosina, metionina y selenometionina asociadas con la enfermedad celíaca coinciden con el conocido agotamiento de estos aminoácidos por el glifosato”.

“Los pacientes con enfermedad celíaca también tienen un riesgo mayor conocido de linfoma de Hodgkin, que también se ha relacionado con la exposición al glifosato”.

“La incidencia del linfoma no Hodgkins ha aumentado rápidamente en la mayoría de los países occidentales en las últimas décadas. Las estadísticas de la American Cancer Society muestran un aumento del 80% desde principios de la década de 1970, cuando se introdujo por primera vez en el mercado el glifosato”.

“Los problemas reproductivos asociados con la enfermedad celíaca, como la infertilidad, los abortos espontáneos y los defectos de nacimiento, también pueden explicarse por el glifosato”.

PRÁCTICAS AGRÍCOLAS

Los residuos de glifosato en cereales, azúcar y otros cultivos están aumentando probablemente debido a la práctica creciente de desecación de cultivos justo antes de la cosecha, según los investigadores. La práctica secreta e ilegal se ha convertido en una rutina entre los agricultores convencionales desde los años noventa.

Irónicamente, la práctica aumenta los rendimientos al matar los cultivos. Justo antes de que las plantas mueran, liberan sus semillas para propagar las especies. “Se va a sembrar a medida que muere. En su último suspiro, libera la semilla”, dijo Seneff a The Healthy Home Economist

CONCLUSIONES

Según se indica en el Protocolo de diagnóstico precoz de la enfermedad celiaca, ésta puede llegar a desarrollarse por una serie de factores ambientales que todavía están en estudio. Entre ellos el propio estado de salud de la persona, su predisposición genética, la exposición a antibióticos, infecciones o su situación personal. En cuanto a la relación entre enfermedad celiaca y el uso del glifosato, solamente tenemos constancia de este estudio publicado en 2013.

Este estudio explica que el glifosato podría incluirse como uno de los factores ambientales que puedan provocar un desarrollo de la enfermedad celíaca. Los investigadores se han basado en una recopilación de los efectos tóxicos del glifosato en animales, debido a que muchos de los signos y síntomas son similares a los síntomas que padecen los humanos con enfermedad celiaca.

Sería conveniente una mayor investigación de los efectos de dicho herbicida en la salud, observando la relación entre el aumento del uso del glifosato y el aumento de casos de la enfermedad celíaca; además de las similitudes de los síntomas de las pruebas realizadas en animales con la de los síntomas de la enfermedad celíaca.

Lejos de querer crear alarmismo social, nos limitamos a transmitir la información del estudio en el que llegan a la conclusión de la posible relación del uso del glifosato y la epidemia de la enfermedad celíaca. Convendrían más estudios independientes sin ningún conflicto de intereses para llegar a mejores conclusiones sobre los efectos del glifosato en el cuerpo humano y sus posibles relaciones en el aumento de la enfermedad celíaca.