martes, 8 de abril de 2014

CON TU PUEDO Y MI QUIERO... ¡¡¡VAMOS JUNTOS COMPAÑERO!!!

El 10 de Mayo 2014 tenemos una cita en Madrid los enfermos de Sensibilización Central

EL HOLOCAUSTO SUMERGIDO CONTRA LOS ENFERMOS INVISIBLES
(fibromialgia, encefalomielitis mialgica/sfc, sensibilidad química múltiple, electrosensibilidad)
  • No les hacen falta grandes ejércitos, ni campos de concentración…
  • No les hace falta empujarnos dentro de una cámara de gas con la excusa de darnos una ducha…
  • Han aprendido con los años y saben que la Historia no se los perdonaría…
Ahora realizan su trabajo de una forma más sutil, el exterminio de los enfermos se realiza de forma silenciosa y continuada para no levantar sospechas, para que cada día estén más agotados y sean ellos mismos los que se quiten de en medio, para que nadie sospeche que la mano del Gobierno les está empujando a dejar esta vida para que no ocasionen más gasto a las arcas del Estado…

El método es muy sencillo denegar las bajas a todos los enfermos; para que se entienda el por qué vamos a explicarlo con sencillez y en pocas palabras:
  • Valorar a la baja las minusvalías
  • Paralizar las solicitudes de dependencia o retirarlas
  • Si no hay bajas, no hay altas a las que recurrir
  • Si no hay altas que recurrir, no podemos llevarles a juicio
  • De esta manera tan sencilla nos cortan la vía judicial que casi siempre nos daba la razón.
Si este colectivo ya lo tenía difícil antes, ahora nos barren de un plumazo de cualquier posible defensa y nos envían directamente a la exclusión social.

Actualmente esto se está practicando sistemáticamente entre otras en las Comunidades de Madrid, Galicia y Andalucía, estamos intentando averiguar si hay más comunidades donde se dé esta práctica vil y canalla, como asociación estatal nos preocupa que otros compañeros estén sufriendo este trato y se encuentren sin apoyo para hacer frente a este holocausto al que nos están llevando.

Es cierto que esto afecta a todo tipo de enfermos crónicos con los que nos solidarizamos, como no puede ser de otra manera porque todos estamos en las mismas circunstancias.

Somos más de 4.000.000 de afectados, en el Estado Español de Síndrome de Sensibilización Central. Sensibilidad química múltiple, Fibromialgia, Encefalomielitis mialgica/Síndrome de Fatiga Crónica y Electrosensibilidad. Sin contar con la falta de datos para contabilizar el número de afectados de electro Sensibilidad.

Son muchas las personas que están mal diagnosticadas o carecen de diagnóstico.

Se estima que el 20% de la población tiene algún tipo de síntomas, como alergias, ansiedad, intolerancias a perfumes, ambientadores, cremas, limpiadores, disolventes, combustibles, conservantes, alimentos, etc.

¡BASTA YA!, de arrancarnos Derechos Constitucionales y Derechos Humanos, en pro de “salir de una crisis que nosotros no hemos creado”

¡BASTA YA!, de sanear bancos con el dinero de la sanidad, educación, protección de desempleo, de personas dependientes, etc.

¡BASTA YA!, de impuestos insostenibles, subiendo los precios de electricidad, gas, combustible, alimentación, etc. imposibles de afrontar con una pensión de 600 E o una prestación de desempleo de 400 E.

Muchos afectados, ni siquiera tienen estas prestaciones.

¿Dónde Está la Protección a la Familia?

Los enfermos de Sensibilidad Química Múltiple, Encefalomielitis Miálgica/SFC, Fibromialgia, Electrohipersensibilidad, llevamos décadas pidiendo asistencia sanitaria, a pesar de ser enfermedades que no tienen cura, su tratamiento es paliativo y multidisciplinar.

Ahora se suman todos los enfermos crónicos a estos brutales recortes.

Enfermos de cáncer, Parkinson, Alzheimer, Esclerosis Múltiple, Aspergen, enfermedades neurológicas, genéticas, enfermedades crónicas y otras enfermedades de origen medioambiental….
  • Nos dejan si atención médica, sin recursos, para vivienda, alimentos......
  • Con prestaciones ridículas, sin ayudas a la dependencia, al desempleo........
  • Ya hay demasiadas víctimas, muertes, suicidios, desahucios, indigencia…...
  • Todos estamos enfermos, todos tenemos derecho a la vida y a la salud
  • ¿Hasta cuándo vamos a seguir callados y calladas?
¡Basta ya de corruptos!, a los que se juzga y condena, que no devuelven los millones de euros robados y que son indultados por el gobierno.

En esta situación extrema, no sólo no les basta con culparnos de ser una carga social, sino que además nos acusan de que salimos muy caros a la Seguridad Social.
  • ¿CAROS, ENFERMOS QUE NO CONSUMEN MEDICAMENTOS?
  • ¿QUE NO PUEDEN ACUDIR A URGENCIAS?
  • ¿QUE NO SE LES HACE PRUEBAS?
  • ¿QUE NO TIENEN ACCESO A LOS HOSPITALES?
  • ¿QUE NO PUEDEN UTILIZAR AMBULANCIAS?
Y no podemos utilizar todos estos servicios porque el sistema sanitario no está preparado para atendernos.

¿NO SERÁ QUE NO SOMOS RENTABLES PARA LAS MACROINDUSTRIAS FARMACEUTICAS?

Somos personas enfermas, que hemos trabajado, contribuido durante décadas a sostener el Sistema de Pensiones y de la Seguridad Social, y ahora nos excluyen, porque somos un gasto que resta los beneficios de sus robos corruptos e impunes.

La única defensa que tenemos todos los colectivos es unir fuerzas para reclamar nuestros derechos, a pesar de nuestras enfermedades juntos podemos plantar cara a estos recortes que nos están llevando a la exclusión, la pobreza, la desatención sanitaria, la….

Tenemos los mismos problemas, tenemos los mismos fines, estamos enfermos,…..

Por todo esto llamamos a la UNIDAD para acabar con esta situación, pasemos a la acción, denunciemos colectivamente, salgamos a la calle todos unidos, apoyemos todas las iniciativas,…...

¡Busquemos lo que nos une, NUESTRA ENFERMEDAD!

¡UNIDOS PODEMOS!

Fdo:

Junta Directiva ALTEA SQM
Móvil: 606 289 594

Equipo de Administración FIBROAMIGOSUNIDOS.COM Y REBELIÓN MOVIMIENTO 12 DE MAYO

Sensibilidad Química Múltiple: la importancia de escuchar sin prejuicios

La autora analiza las dificultades para diagnosticar y tratar a las personas que presentan Sensibilidad Química Múltiple y hace una serie de recomendaciones a facultativos y personas en contacto con las afectadas.  

Mar Rodríguez Gimena Médica de familia 
06/04/14

Foto de mi-estrella-de-mar.blogspot.com /
Desde hace unos años me dedico a la valoración de las personas que padecen Sensibilidad Química Múltiple (SQM). Partía de un absoluto desconocimiento de esta nueva enfermedad relacionada con los químicos medioambientales. Gracias a la red de mujeres sanitarias entré en contacto con la doctora Carme Valls y asistí a uno de los cursos de formación. Ya había oído hablar o había leído en la revista MyS(Mujeres y Salud) algo sobre las personas que, tras una exposición a algún pesticida en su lugar de trabajo o a disolventes, se sensibilizaban y enfermaban. Haciendo memoria también había escuchado en la consulta algún relato de alguna “paciente” que me comentaba que “olía mucho”. Reconozco que esos relatos, al igual que otros a lo largo de mi vida profesional, me han dejado sorprendida y perpleja y me han puesto en contacto con mi propia ignorancia. Por suerte todavía, cuando algo me sorprende, me dedico a estudiar. No obstante no he conseguido quitarme de la cabeza el run run de: “no, otra vez algo raro, no”.

Los síntomas que nos relatan las personas afectadas por SQM nos van a parecer raros. De hecho muchas inician su relato con un no sé si se lo va a creer, doctora, porque esto que me pasa es muy raro” o “realmente usted cree que yo no estoy loca, ¿verdad?”. Estas personas han recorrido muchos especialistas. En ocasiones la media de años desde el inicio de los síntomas de su enfermedad hasta el diagnóstico es de unos 5 a 7. A su vez, las afectadas son grandes observadoras de sus síntomas, de lo que las mejora y empeora. Son detectives de su propia enfermedad, buscando siempre el nuevo artículo, el nuevo tratamiento. De hecho muchos de los artículos que manejo me los envían las propias afectadas.

La SQM es un problema de salud complejo que precisa de un abordaje terapéutico multidisciplinar. Comparto las propuestas de Pamela Gibson, enfermera que trabaja con personas con SQM y ha publicado numerosas investigaciones sobre su impacto en la calidad de vida. Gibson señala que es muy importante tener en cuenta la frustración sufrida por las personas con SQM en su relación con los y las profesionales sanitarios, lo que debería servirnos para entender mejor las necesidades de apoyo de este grupo de personas, la importancia de aumentar su sensación de esperanza. También deberíamos aumentar nuestra capacidad de comprensión haciendo hincapié en las personas afectadas más jóvenes. Este colectivo se siente más alterado por lo que la enfermedad supone de pérdidas, posiblemente de por vida, tanto de su trabajo, amistades, contactos familiares, ocio y en muchas ocasiones la propia pareja. Dado que las personas con SQM con frecuencia se enfrentan a que los demás tengan dudas a la hora de reconocer su enfermedad, simplemente escuchar y ser comprensivas/os con la importancia de sus preocupaciones es de vital importancia.

El calvario de las bajas laborales

Casi todo el mundo que ha tenido que pasar por un proceso de indemnización por haber sufrido una enfermedad relacionada con el puesto de trabajo describe este proceso como difícil y humillante, debido a su duración, a la complejidad burocrática del proceso, sin guías claras para las personas enfermas, y a cómo se trata a los y las demandantes durante la evaluación. Un estudio de las investigadoras canadienses Juliene G. Lipson y Nathalie Doiron revelaba que las personas afectadas de SQM que han pasado por ese proceso han percibido una agenda oculta: los responsables de los servicios de evaluación de las bajas los envían a profesionales de medicina que niegan dicha enfermedad, tanto porque no la conocen/comprenden como porque protegen al centro de trabajo a expensas del trabajador/a.

En Estados Unidos, la mayor parte de los tribunales de evaluación fallan en contra de las personas con SQM, incluso habiendo pruebas suficientes para demostrar que padecen una discapacidad cubierta por el sistema. La situación es aún peor en Canadá, donde casi nadie obtiene el reconocimiento de la discapacidad basada solamente en la SQM. Solamente se ha concedido los beneficios de la discapacidad a quienes tenían un diagnóstico psiquiátrico, a pesar de no padecer problemas mentales. Curiosamente, las personas con hipersensibilidades medioambientales parecen tenerlo algo más fácil para demostrarlo en la provincia canadiense de Nueva Escocia, después de que un grupo de médicos y médicas enfermara tras un gran incidente químico en un hospital.

Además, las personas afectadas de SQM se enfrentan a obstáculos similares a los que encuentran las personas que tienen otras enfermedades crónicas ocultas: que se trata de enfermedades que afectan desproporcionadamente a las mujeres, que son difíciles de diagnosticar porque se presentan de muy diversos modos y que no hay pruebas ampliamente aceptadas.

La importancia de la formación de los y las profesionales sanitarios

Apoyo enérgicamente las sugerencias de Pamela Gibson y de otras muchas personas expertas, entre ellas Carme Valls, de que la formación/educación sobre SQM debería ser impartida en los programas curriculares y de postgrado de medicina, enfermería, trabajo social y psicología. También habría que formar a las empresas y representantes sindicales en SQM para reducir el hostigamiento y acoso en el centro de trabajo.

Así mismo, es muy importante incluir contenidos sobre discapacidad, sobre discapacidad oculta y enfermedades crónicas en particular, en los currícula de la formación del personal sanitario y de servicios sociales, sobre todo porque la prevalencia de este tipo discapacidad se está incrementando debido a las condiciones ambientales. Esta formación es necesaria para favorecer una atención más comprensiva y sensible a las personas con SQM y enfermedades similares. También es imprescindible animar al uso del principio de precaución, para desarrollar leyes que protejan la salud y el medioambiente, y que se pase del “¿cuánto daño es permisible?” al “¿cuál es el menor daño posible?”.

Termino con una reflexión de Pamela Gibson y colaboradoras sobre la importancia de abordar cambios en la forma de vida en una cultura en que los productos químicos son omnipresentes. Las personas afectadas por SQM son una población oculta y sin recursos. Sus historias algunas veces son contadas por otros y sus problemas con frecuencia atribuidos a factores mentales o emocionales. Su voz desafía el estatus quo económico al sugerir que productos químicos de uso común son capaces de sensibilizar e incluso dañar a las personas de un modo permanente. Para quienes están inmersos en la cultura dominante es más fácil no creerse lo que dicen las personas afectadas que abordar el problema de los tóxicos en la vida diaria, debido, en gran parte, a la enorme inversión económica en investigación sobre materiales químicos omnipresentes en una cultura industrial. Ellas son en nuestro mundo como los canarios en la mina de carbón. Lo que les ha sucedido a ellas sucederá a muchas otras personas a menos que limpiemos nuestro entorno.

El artículo completo ha sido publicado dentro de la revista Mujeres y Salud MyS, editada por la Red de Mujeres Profesionales de la Salud CAPS (Centro de Análisis y Programas Sanitarios). 

NUEVAS ENFERMEDADES HUMANAS INDUCIDAS POR CAMBIOS MEDIOAMBIENTALES

ANTES
DESPUES
Podemos situar en el año 1949 el inicio de la contaminación química del planeta tierra con la introducción del DDT, un pesticida clorado que tras la ilusión inicial del control de plagas en agricultura se demostró como altamente tóxico para la salud humana.

Es decir hace solo 65 años nuestro entorno estaba casi limpio, solo afectado por algunas combustiones del inicio de la etapa industrial.

En estos nefastos 65 años la proliferación de sustancias químicas nocivas para la salud humana han sido de tal magnitud que ya estamos viendo cambios medioambientales que atacan a nuestra madre Tierra y a la salud humana de forma altamente nociva.

Y es a la salud humana a la que voy a enfocar este artículo de revisión y que tiene como objetivo crear una conciencia colectiva del abismo a que nos dirigimos sin remedio si no cambiamos ya nuestras múltiples agresiones medioambientales.

Nuestra industria con el uso de combustibles fósiles sigue lanzando CO2 a la atmósfera produciendo el calentamiento global de nuestro planeta. El cambio climático ya lo observamos en el deshielo de los polos, el aumento del nivel de las aguas oceánicas, las intensas lluvias en algunas zonas, los huracanes, y las sequías dramáticas entre otras.

El uso de sprays y otras sustancias están destruyendo nuestra capa de ozono que nos protege del efecto nocivo de los rayos solares, los ultravioletas induciendo aumentos de los cánceres de piel.

Pero son sobretodo las sustancias químicas, las nuevas moléculas introducidas por la industria las que ya de forma evidente están afectando a la salud humana y a ellas nos vamos a referir, no sin antes recordar los accidentes nucleares de Chernobil y Fukushima que nos ha invadido de isótopos radioactivos que persistirán por cientos de años siendo ocultado por los intereses económicos de la industria/mafia nuclear.

Ría de Huelva 
Tenemos que comenzar con la SENSIBILIDAD QUÍMICA MÚLTIPLE, hay personas que son como alérgicas, intolerantes a estas nuevas moléculas químicas y enferman de muy diferentes formas dependiendo de su genética. Dentro de este grupo tenemos:
  • SINDROME DEL CANSANCIO CRÓNICO
  • FIBROMIALGIA
  • SINDROME DEL EDIFICIO ENFERMO
  • TIROIDITIS QUÍMICA HUELVA
Tiroides y contaminantes ambientales químicos:

La enfermedad del Síndrome Químico. La tiroiditis química es una variante de la tiroiditis autoinmune descrita por el japonés Hashimoto, allá por el año 1916. Es una inflamación de la glándula tiroidea que aparece por la producción anómala de autoanticuerpos contra nuestra propia glándula. La tiroiditis de Hashimoto se manifiesta de igual forma en todos los núcleos poblacionales, sin diferencias significativas de edad o sexo.

El síndrome pluriglandular tóxico de Huelva (SPTH) aparece en 1995 después de una sequía de 5 años duración, cuando nuestros pantanos estaban al 8% de su capacidad. Dicho síndrome se manifiesta inicialmente en forma de Tiroiditis Autoinmune con características clínicas, analíticas y morfológicas diferentes a Hashimoto. Algunos pacientes presentaron manifestaciones de disfunción inmune que afectaron a más órganos/sistemas, fundamentalmente páncreas, hígado, médula ósea, adrenales, gónadas y riñones, todos con la característica común de "autoinmunidad. En realidad SPTH puede ser considerado como una subcategoría del Síndrome de Sensibilidad Química Múltiple inducido por PCBs, Dieldrin y Endosulfan, la muy alta actividad de nuestro sistema inmune, muy alta y permanentemente, que a la larga acaba por agotar a la máquina biológica humana que padece esta alta hiperfunción durante un tiempo prolongado, apareciendo el Síndrome del Cansancio Crónico, la Fibromialgia, Síndrome de Sensibilidad Química Múltiple (SQM) y otras patologías/enfermedades, además de las descritas.

Unos de los primeros afectados por químicos induciendo patología humana conocida y bien documentada, aunque muy ocultada por intereses económicos, fueron los veteranos de la guerra de Vietnam que utilizaron exfoliantes. Posteriormente los veteranos de la guerra golfo pérsico presentan un síndrome complejo conocido como Síndrome de la Guerra del Golfo y que se manifiesta fundamentalmente en forma de disfunción inmune. En Checoslovaquia el Prof. Mc Lagan ha descrito una patología tiroidea inducida por los PCBs de las factorías rusas después de la invasión 1968..., que el Epidemiólogo Goldsmith, de Israel, considera una manifestación más en el tiempo de nuestro SPTH.

La acción mutagénica de químicos: PCBs, dioxinas, Dieldrin, Endosulfan, Bromuro de Metilo, sulfurados, clorados (en su mayoría, pesticidas), etc., no es ya una hipótesis sino una evidencia en parte silenciada por intereses ocultos. Esta acción mutagénica puede afectar a un gen inmunomodulador induciendo patología inmune y/o un oncogén induciendo cáncer. Importante recordar que si un gen es mutado el efecto nocivo del químico persiste a pesar de que evitemos su contacto. El químico promueve la mutación del gen y esta mutación persiste a posteriori. (Síndrome de la Guerra del Golfo, SPTH).

El síndrome SQM es producido por exposición crónica a sustancias químicas y sus síntomas son fatiga crónica, dolor muscular, rashes (urticaria), asma, pérdida de la memoria, dolor de cabeza y problemas respiratorios y neurológicos. Existe en Houston (Texas, EE.UU.) un hospital donde tratan este síndrome o enfermedad. Allí saben bien las causas de estas dolencias, pero aún a su pesar, parece que la sanidad pública juega a la “Gallinita ciega”, porque mirar para otro lado ya no puede, pues mire a donde mire se topas con los enfermos víctimas de la insensatez de los políticos y la codicia de los empresarios, que sistemáticamente niegan estos efectos, aún a pesar de las investigaciones que avalan lo contrario.

Francisco López Rueda
Huelva 
Y he introducido este bloque publicado por enfermedad humana en Huelva por el interés de nuestra triste afección química.

Los caimanes/cocodrilos de los grandes lagos de Florida fueron casi exterminados por los contaminantes químicos que los afluentes vertían en sus aguas procedentes de polos químicos cercanos, eran los ya mencionados PCBs y DIOXINAS, que por su efecto feminizante (como hormonas femeninas llamadas estrógenos), esterilizaron a los machos y la colonia empezó a mermar. Estos animales que sobrevivieron al meteorito hace 60 millones de años estuvieron a punto de ser exterminados por contaminantes químicos. ¿Os haceis idea lo que puede estar pasando al ser humano expuesto a las mismas sustancias quimicas? Pues los varones se quedan sin esperma y hemos pasado de un recuento de 300 millones a 60 en solo 50 años, de recuento espermático. Qué pasará en otros 50 años???

Pero estas nocivas moléculas químicas atacan al sistema inmune que es el que nos defiende y nos volvemos más vulnerables a todas las enfermedades, como el cáncer de colon o el de mama, próstata, pulmón etc.

Y los microorganismos, bacterias y virus nos atacan con más intensidad y surgen las superbacterias resistentes a todos los antibióticos conocidos.

Y la comida basura viene con múltiples moléculas dañinas que los jóvenes nos comemos con entusiasmo porque las multinacionales de la alimentación saben como engañarnos con una publicidad falsa.

La única solución es tomar conciencia de este grave problema y empezar a actuar, evitando la enorme manipulación de los alimentos, los transgénicos, el uso de combustibles fósiles que habrá que cambiar por fuentes de energía limpias.

Empecemos pues a tomar conciencia de este problema y actuemos en defensa de nuestro medio ambiente. Es la única forma de sobrevivir que le queda a la especie humana, mal llamada homo sapiens, yo diría mejor el gran depredador.

Francisco José López Escobar
Francisco López Rueda