Publicado por John Swaigen en Emfermedades ambientales
Por Swaigen John y Robert Peterson, Abogados
Por John Swaigen y Robert Peterson, Personal Abogados
Algunas de nuestras victorias legales para los canadienses y su entorno atraer la cobertura de noticias. Otros, como nuestro trabajo con Varda Burstyn, ganan menos de un toque, pero son igual de importantes. Varda Burstyn es un autor canadiense premiado que sufre de sensibilidades ambientales o de sensibilidad química múltiple (ES / MCS). Las personas con esta condición se ven afectados por los productos químicos mayoría de nosotros no se dan cuenta en a en un momento a momento, pero que son los principales responsables de la salud perjudica expresa en enfermedades crónicas y trastornos reproductivos y neurológicos.
Toxinas del moho, junto con los diversos químicos que se encuentran en nuestros hogares y lugares de trabajo, amenazan la salud de Varda. Ellos hacen su enfermo. Los expertos médicos dicen que el mejor tratamiento para esta enfermedad es eliminar los materiales y productos que contienen ciertas sustancias químicas en el hogar. Pero estas renovaciones puede ser costoso. Varda y su marido gastaron más de 200.000 dólares para hacer su hogar un ambiente seguro.
Reclamaciones que a Varda se les niega
Después de la renovación, Varda y su esposo solicitaron créditos fiscales que se ofrecen a las personas que necesitan para equipar a sus hogares por razones médicas. Por ejemplo: una persona en silla de ruedas que tiene rampa para sillas de ruedas construida para el acceso a su hogar es elegible para recibir el crédito. Sin embargo, la Agencia de Ingresos de Canadá rechazó las acusaciones y dijo Varda los tipos de modificaciones en la vivienda que necesitan las personas con discapacidad su no reunía los requisitos para el crédito. Ella le dijo a la Comisión Canadiense de Derechos Humanos que esta acción violó su derecho en virtud de los Derechos Humanos del Canadá Ley de estar libre de la discriminación por motivos de discapacidad.
El 24 de abril de 2012, Varda ganó su batalla de tres años para tener una audiencia ante el Tribunal Canadiense de Derechos Humanos. Nosotros en Ecojustice estaban orgullosos de haber ayudado a Varda convencer a la Comisión Canadiense de Derechos Humanos que la negación de la Agencia de Ingresos de Canadá de sus afirmaciones mostró evidencia de discriminación contra ella y otras personas con su condición.
El Acuerdo
En diciembre pasado, representamos a un canadiense Varda mediación Tribunal de Derechos Humanos. La asociación con el ARCH Disability Law Centre, negociamos un acuerdo confidencial que mejora la vida de Varda y pueden prevenir futuras discriminaciones contra los enfermos de Sensibilidad Ambiental.
¿Por qué nos involucramos?
Apoyamos Varda, porque creemos que el acceso a un medio ambiente sano es una cuestión de derechos humanos. También creemos que la reducción de nuestra exposición a los productos químicos tóxicos, especialmente los que se encuentran en el hogar, protegerá a los canadienses. Y estamos orgullosos de que nuestro trabajo legal permitido Varda para reclamar su victoria.
Pedimos Varda si podía compartir sus sentimientos con usted y ella aceptó.
Por Varda Burstyn
Más de un millón de canadienses han sido diagnosticados con sensibilidades ambientales. Es probable que usted no sabe que las personas con esta condición vuelto muy enfermo, incluso con pequeñas exposiciones a los productos químicos cotidianos como suavizantes y retardadores de llama y pesticidas.
Es probable que usted no sabe que lo aísla MCS víctimas y facilita el acceso a la salud o médico habitual apoya difícil. Y lo más probable es que no sabes que la mayoría de las personas con ES / MCS se enfermó debido a la exposición a sustancias químicas tóxicas en todas partes han desbordado nuestra capacidad para desintoxicar, una capacidad que varía de individuo a individuo. Estoy hablando de los plaguicidas, mi ruina personal, o sustancias químicas en los materiales de construcción nuevos. Estoy hablando de los productos químicos industriales, sino también los productos químicos cotidianos que le rodean, y que puedes leer en la muerte lenta por Pato de goma (Slow Death By Rubber
Duck), por Rick Smith ex director ejecutivo de la Defensa del Medio Ambiente (Environmental Health Institute of Canada), y Lourie Bruce,
o, más técnicamente, en la exposición temprana a los productos químicos peligrosos / Contaminación y asociaciones con enfermedades crónicas: una revisión de alcance, un informe de la Asociación Canadiense de Derecho Ambiental (Canadian Environmental Law Association), el Colegio de
Médicos de Familia de Ontario (The Ontario Chapter of the College
of Family Physicians) y el Instituto de Salud Ambiental de Canadá (Environmental Health Institute of Canada).
Así que mi batalla era acerca de una discapacidad, ¿verdad? Pero también fue una batalla ambiental sobre la necesidad de reconocimiento institucional de los derechos de las personas con discapacidad por la exposición a las sustancias químicas que muchos fabricantes, como los miembros de la American Chemistry Council vestíbulo quieren que creamos que son seguros.
Una de las razones por las que probablemente no saben estas cosas es que muchos enfermos de Sensibilidad Ambiental - de los cuales yo soy uno - se esconden. Tenemos que crear hogares libres de químicos para poder sobrevivir, por lo que a menudo no nos vemos. Un estudio realizado en EE.UU. fijó el coste medio para un hogar seguro para alguien como yo a EE.UU. $ 57,000 - un gran éxito financiero en el momento en que la gente pierde la mayor parte o la totalidad de su capacidad de generar ingresos debido a la aparición de graves sensibilidades ambientales. Estar confinado a nuestros hogares hace que sea muy difícil para nosotros luchar para cambiar las percepciones sobre estos temas y para reducir nuestra exposición a los productos químicos tóxicos, mientras que un lobby químico bien financiado industria mantiene una campaña para pintar las personas con sensibilidades químicas como problemas emocionales, no físicamente heridos.
Cuando Ecojustice decidió apoyarme, demostró la iluminación real. Una casa segura químicamente se considera el tratamiento médico más importante para las personas con sensibilidades ambientales, pero la Agencia de Ingresos de Canadá me impidió reclamar los créditos tributarios. Ecojustice entendía lo que estaba en juego: es injusto que nuestras principales instituciones se les permite rechazar el reconocimiento oficial de las consecuencias de la lesión tóxica y negar apoyo financiero que puede mejorar la vida de los canadienses.
Mi batalla duró casi cuatro años. Ecojustice intervino en el último año y medio, cuando la Agencia de Ingresos de Canadá intentaron detener a la Comisión Canadiense de Derechos Humanos de completar su propia investigación de mi queja. En aquel entonces, yo quería dejar de fumar. Pero Ecojustice me ayudó a rechazar esta barrera, y me ayudó todo el camino hasta el Tribunal Canadiense de Derechos Humanos. ARCO, la organización de derechos de los discapacitados asistencia legal, trabajó con el personal de abogados Ecojustice Swaigen John y Robert Peterson. Juntos hemos luchado por el reconocimiento sistemático y procedimientos que hacen más posible que las personas con sensibilidades ambientales para solicitar los créditos fiscales que disponen las personas con otras discapacidades y deficiencias.
Antes de la audiencia en el Tribunal Canadiense de Derechos Humanos, tuvimos la oportunidad de discutir una posible solución. La mediación es el último paso antes de una audiencia completa, que puede ser costoso y consume mucho tiempo. El martes, 18 de diciembre, nos reunimos con la Agencia de Ingresos de Canadá. El resultado de estas audiencias es casi siempre obligados por acuerdos de confidencialidad, y este fue el caso aquí.
Pero los partidarios Ecojustice debe saber esto: que el resultado fue positivo y significativo en relación a nuestros objetivos, un verdadero paso hacia adelante, y una verdaderamente increíble. Yo creo que la educación de los altos funcionarios del gobierno de la Agencia de Ingresos de Canadá acerca de mi discapacidad, así como una comprensión más profunda de las sensibilidades ambientales de la Comisión Canadiense de Derechos Humanos debería tener consecuencias positivas.
¡Gracias
Mi esposo y yo queremos dar las gracias a Ecojustice desde el fondo de nuestros corazones. Nuestra victoria no hubiera sido posible sin su apoyo. Y gracias a ti ya todos los que apoyan Ecojustice. Todo este proceso no era sólo yo, o el resto de los canadienses sufren de sensibilidades ambientales. Se trataba de todos nosotros.
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