martes, 15 de diciembre de 2015

Las ciencias médicas y el ambiente

El medio ambiente se ve afectado fundamentalmente por la contaminación. La contaminación representa una epidemia invisible para la salud. Los profesionales de la medicina y de las ciencias de la salud tienen la obligación moral y la oportunidad clínica de hacer visible y ayudar a controlar este proceso mundial.

Eduardo Tassano 
Máster en 
gerenciamiento en 
servicios y sistemas 
de salud 
Especial para época  
El doctor Lalonde, canadiense, en el año 1974 estableció la famosa idea de los 4 determinantes de la salud. Los 4 determinantes que hacen a la salud son la Genética, El estilo de vida, la atención sanitaria y los factores ambientales.  

Actualmente se atribuye a los factores ambientales el 24 % de la carga de enfermedad y mortalidad en el mundo. ¿Cómo se produce esta carga? ¿Cómo el ambiente daña la salud? ¿Qué hay que hacer desde el punto de vista de la salud pública para enfrentar este tema?. El medio ambiente ha sido siempre, en la historia de la especie humana, un importante determinante de la salud. Pero en los últimos 50 años la ola de consumismo y crecimiento acelerado han disparado los riesgos ambientales que afectan y afectarán cada vez más a la salud, de las poblaciones actuales y futuras.

El medio ambiente se ve afectado fundamentalmente por la contaminación. La contaminación representa una epidemia invisible para la salud. Los profesionales de la medicina y de las ciencias de la salud tienen la obligación moral y la oportunidad clínica de hacer visible y ayudar a controlar este proceso mundial de degradación del medio ambiente, y estudiar la conexión causal entre determinadas enfermedades graves y ciertos agentes químicos ambientales.

Se calcula que hoy en la Industria en general son utilizadas unas 100.000 sustancias químicas y entre ellas unas 4.000 y 8.000 están bajo sospecha de toxicidad. El medio ambiente exterior y el medio interior de los hogares y puestos de trabajo están cada vez contaminados por más sustancias, se calcula también que hasta un 45% de los alimentos que consumimos presentan residuos tóxicos.

Estos tóxicos ambientales llegan al ser humano a través del aire que respiramos, del agua que bebemos y los alimentos que comemos. Un elemento de crucial importancia y difícil de creer y medir es la contaminación de los alimentos. Hecho que hay que valorar desde la producción hasta la comercialización industrial de los alimentos.

Los efectos sobre la salud de todos estos productos tóxicos son sobre el sistema endocrino, (hormonas), el sistema reproductivo (afectando la fertilidad por ejemplo), neurotoxidad especialmente graves cuando se dan en personas más vulnerables, como son las mujeres embarazadas, el feto, los bebés y niños en crecimiento. Existe una importante influencia en la generación de enfermedades cardiovasculares y diabetes y sin dudas son causantes de varios tipos de cánceres y alteraciones genéticas.

Se considera además la aparición de nuevas patologías o enfermedades llamadas “emergentes” como Fibromialgia, la Fatiga crónica, La hiperactividad infantil, El síndrome de Sensibilidad química múltiple, entre otros.

Las diferentes formas de contaminación generan productos químicos en el ambiente que pueden llegar al ser humano. Estos productos químicos dañinos pueden permanecer largo tiempo en el ambiente y toman el nombre genérico de Compuestos Tóxicos Persistentes (CTP). Estos productos podrían explicar una parte relevante de las cifras de las enfermedades más frecuentes.

Podría ser una exposición larga en pequeñas cantidades o una gran exposición de gran cantidad. En cualquiera de las formas se puede generar un daño significativo a la salud.

Hoy los sistemas de atención sanitaria no están preparados para trabajar con esta epidemia y, lo peor, el cuerpo de profesionales no está formado para “pensar” en este tipo de enfermedades y sus causales. Lo que se hace, como en muchas otras enfermedades, es actuar al final del proceso, es decir para curar o paliar casos graves, siempre con alto costo.

Si bien hay programas de prevención, las enfermedades siguen aumentando. En muchos pacientes se puede influir individualmente en la concientización y mejora de los hábitos o exposiciones dañinas pero el ambiente necesita de cuidados globales donde los gobiernos tienen que tomar el toro por las astas y realizar políticas preventivas de impacto total. 
Algunos ejemplos de contaminación que dañan la salud

Hay ejemplos a nivel mundial y conocidos como las exposiciones a metales pesados como el Plomo y el Mercurio que, con exposiciones en periodos críticos del crecimiento del niño, pueden afectar el desarrollo neurológico l (funciones sensoriales, cognitivas y motoras). En este tema se ha obtenido una gran mejora a partir de la prohibición del Plomo en las gasolinas. No es de menor importancia la contaminación del agua, de la calidad del agua potable y sus efectos sobre la salud; el efecto de los subproductos de la cloración, los trihalometanos y otras sustancias que se encuentran en las aguas de consumo de nuestras ciudades y pueblos, con efectos cancerígenos como el cáncer de vejiga o generación de abortos espontáneos, o bajo peso al nacer.

Los pesticidas son más estudiados y generan los llamados Compuestos Orgánicos Persistentes (COPs) que han generado episodios de contaminación masiva.

El otro concepto nuevo y que está son los llamados disruptores endocrinos. Estos son sustancias químicas que tienen capacidad de provocar disfunciones hormonales, afectan, entre otros, a la fertilidad, el crecimiento, el metabolismo, el sistema inmunitario y son cancerígenos. Plaguicidas (como el endosulfán y otros) son ejemplo de esto.

Hasta donde han cambiado las cosas que también se habla de “La contaminación interior de las viviendas”, es otro tipo de contaminación que está creciendo en el mundo desarrollado: volátiles que se desprenden de plásticos, pinturas y barnices, diversos materiales de construcción o aparatos del hogar, productos de desinfección, insecticidas, de limpieza, cosméticos, ambientadores, plásticos de envoltorios, etc. Muchos de estos productos se comportan como disruptores endocrinos y Compuestos Orgánicos Persistentes.

También son parte de la contaminación interior de las viviendas los campos electromagnéticos de baja frecuencia. En este grupo incluimos a la telefonía móvil, computadoras, espacios Wifi, pantallas televisores, microondas, etc. tienen fuertes sospechas de riesgos de cáncer de cerebro y leucemias (sobre todo en niños) pero también otros cánceres (mama, testículos) y enfermedades neurológicas.

Como se ve, un mundo moderno, complejo, en el cual por el daño ambiental irán cambiando las condiciones día a día con impacto directo en la salud. Hay muchos elementos desconocidos, hay mucho por investigar y descubrir. Eso hace que las consecuencias sean impredecibles.

La salud humana está afectada directamente por este ambiente cambiante. Incremento de enfermedades graves, aparición de nuevas enfermedades inducirán a que la ciencia médica aprenda de estos temas y se deba formar personal de salud para concientizar y enfrentar el mundo que se viene.

Es un problema de solución colectiva, donde los organismos internacionales, instituciones médicas, universidades y los gobiernos tienen la palabra.
  
http://diarioepoca.com/487536/las-ciencias-medicas-y-el-ambiente/

No hay comentarios: